Mientras la WSL sigue buscando la manera de resolver el tour 2021, Erik Logan, el director de la empresa WSL, se subió a lo más alto de su sinceridad y se lanzó de cabeza al vacío amparado en los tiempos de viralización y barbarie que tanto apasionan a los gurúes del mercadeo.
El propio Logan se encargó de aclarar que el próximo campeón del mundo será el que gane la última fecha.
Es decir, si un surfista gana 9 fechas y en el último evento no gana no sale campeón. Quizá en esa última final gane uno que se levantó alineado y tenga el día de su vida, no importa si durante todo el año no logró pasar una sola batería.
Amigas y amigos… El Dios Me Gusta y sus alcahuetes satelitales han ganado la batalla. El mundo del surf va camino a perder su esencia deportiva, donde lo que siempre se buscaba era la excelencia en olas de calidad.
Hoy la WSL está más preocupada por mostrar señores bien peinados en cámara y presentar especiales donde un tipo como Kai Lenny nos muestra su casa, sus tablas y lo que tiene dentro de la heladera.
Volviendo a Logan, el tipo dijo que la última final entre Medina y Ferreyra fue la más vista de la historia. Al parecer no tuvo en cuenta que Brasil es el país más grande del mundo (no hace falta aclarar que esto es una ironía), y estaba clarísimo que nadie se iba a perder esta epopeya brasileña en tierras hawaianas.
Mientras seguimos viendo como nuestro excelentísimo Intendente basa su campaña de aislamiento social en la línea de costa y se olvida de algunas zonas menos glamorosas, donde parece que la cuarentena nunca existió… Seguimos esperando que nuestros días vuelvan a parecerse a aquellos sin barbijo ni nubes de Lysoform.
