Cada vez son más los artistas que a través de su afición por el Surf, plasman sobre un lienzo el trasfondo de sus vivencias y a través de sus anhelos y sus emociones, lo transforman en una auténtica obra de arte. La libertad de sus pensamientos, despega hacía la originalidad, más allá de la realidad, permitiendo al espectador soñar, a través de sus pinceladas. Y en ese preciso instante, se produce una comunión entre el artista, la obra y el espectador, haciéndonos sentir la magia de surfear una ola y la esencia de la libertad.
“La experiencia del pintor, se convierte en el sueño del espectador”.
Una obra de arte, al igual que una ola, es diferente cada vez. Aunque cuenten lo mismo, nunca existirán dos olas iguales, del mismo modo, que nunca habrán dos pinturas iguales. Tanto la ola como la pintura demuestran una emoción, que en definitiva nunca se repetirá.
Las pinturas sobre Surf, no tan solo muestran el sueño y las intrépidas exaltaciones del Surfer, también muestran un hoy y un ahora en la historia y la cultura del Surf. Leer más allá de cada pincelada, es entender el Surf de hoy, que probablemente mañana, cuando echemos la vista atrás, recordemos con nostalgia. Nada es eterno. Ni siquiera la magia experimentada al cabalgar sobre una ola. Nada dura más tiempo, que los trepidantes segundos de una emoción.
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Crear un vínculo entre la vida y el mar hoy, es ver la misma obra de arte dentro de algún tiempo, perpetua, infinita y eterna, donde se observa, que aquello que fue, ya nunca más será. Y recordarás los giros, los saltos y las maniobras que entonces eras capaz de realizar. Y recordarás cada una de tus experiencias. Y una sonrisa se dibujará en tu rostro, porque aquella pintura que todavía permanece en algún lugar de tu habitación, te recordará la impermanencia de la vida y la importancia de haber vivido aquellos momentos como si fueran los últimos de tu vida.
Alguien dijo una vez: “La historia o el mar, no nos pertenecen, sino que somos nosotros los que pertenecemos al mar y a la historia, en un determinado momento de nuestras vidas y en la eternidad de nuestra memoria”.
Aquí aparecen algunos enlaces de pintores que un día decidieron surfear olas, con el pincel de la imaginación y rozaron la magia de la gran ola, a través de su íntima expresión.
– www.clarkssurfarthawaii.com/
Texto: Lorraine de D.
Acuarelas: Giuseppe Berardi
Lorraine de D: Socióloga, escritora y viajera incansable. Dejó su tierra natal en busca de nuevos horizontes y nuevas experiencias que dotaran de sentido, su incansable sed de conocimiento. Fue al llegar al Sur de España y concretamente a playas malagueñas y gaditanas, donde se topó de lleno con la increíble cultura del Surf. Y le pareció tan fascinante, que no pudo contener las ganas de practicarlo.
Interminables tardes de olas, bañadas por hermosísimas puestas de sol, en ambientes joviales y bohemios, la llevaron a querer saber más sobre aquella cultura, que empezaba a desarrollarse cada vez con más fuerza, entre la sociedad costera española. Y el mejor lugar para seguir con aquel ímpetu investigador, que la acompaña en cada uno de sus viajes, fue trasladarse a la cuna por excelencia del Surf en España. Cantabria, Asturias y el País Vasco, le mostraron la otra cara del Surf, todavía desconocida para ella.
Campeonatos nacionales e internacionales como el de Bodyboard de Llanes o el Billabong Pro de Mundaka, famosa por tener, la ola izquierda más larga de Europa, así como el contacto directo con los surfers de competición, le dieron valiosísima información, con la cual está realizando sus propios artículos desde el prisma del análisis sociológico y la mirada del viajero que no tiene límites, ni temporales ni espaciales.
Lorraine también escribe otro tipo de temáticas que le proporcionen algo donde investigar, gracias a las cuales, fue ganadora del concurso de relatos viajeros, al relato más original en julio de 2009.
Su sueño, tener una furgoneta y los recursos necesarios para seguir viajando junto a su pareja y recorriendo las playas y lugares más hermosos de todo el mundo, con el único fin de empaparse de miles de experiencias, surfear olas con mar de fondo perfecto y disfrutar del placer de escribir por escribir.
