Por el Dr. Marsupial
En su primera aparición del año, el Dr. Marsupial nos acerca su mensaje… ¿Esperanzador? Que el lector vea en qué lugar se ubica y al fin y al cabo un año más no mata a nadie.
VIVENCIAS OCEÁNICAS
Freesurfers, cornalos, ladinos, veteranos, porteños, locales, pseudolocales, surfers pro, los del sur, los del norte, perleros, patarras, noveleros, cagaolas, big rider, soul surfer, caretas, grandistas, los rasta surfin, tuberos, vainilleros, orilleros, los que esperan la barredora, y un sin fin de calificaciones a las distintas clases de surfistas. Claro está que no voy a realizar una descripción sobre cada una de ellas… pero no hace falta ser un surfer “pro” para contemplar un fin de tarde, como tampoco necesitamos bajar olas de 4 metros para sentir un poquito de adrenalina. La pasión no entiende de categorías y menos en nuestro ambiente, en donde cada surfer curte el mar a su manera y se nutre de cada una de las vivencias que el océano aporta.
FELIZ AÑO
“…feliz el año nuevo que el viejo ya paso…” solía cantar Carlitos Gardel; y menos mal que se termina. Otro año de mentiras y de devaluaciones de sueños institucionalizado por los medios de comunicación y la ignorancia.
Cada vez tenemos menos tiempo… ya no nos alcanza siquiera para perderlo, pero al menos nos hemos reencontrado con nuestros amigos de la primaria en el facebook.
Otro año que ha pasado, aumentó la pobreza, la marginalidad y la discriminación. Seguimos creyendo que Bin Laden está escondido en una cueva, el niño que actuó de Harry Potter ya tiene pelos en la axila, Huracán sigue siendo el sexto grande y Kelly Slater llegó a su decimo titulo mundial.
Nos queda disfrutar (mientras sea posible) de la naturaleza, de la libertad, de la familia, de las olas y las playas. Brindemos por la mala onda que tenemos cuando no hay olas y por el viento noreste que tanto nos fastidia… Porque al fin y al cabo hay cosas peores.
Un año más, qué importa… como vino se irá.
