¿Hasta dónde es capaz de llegar un hombre? Hasta donde se lo proponga. Claro, que esta respuesta es irrefutable si el que responde es Kelly Slater.
Y ayer el mundo pudo ver el comienzo del fin de la carrera más increíble en la historia del surfing mundial. Kelly cayó ante Griffin Colapinto en Margaret River, no consiguió meterse en el corte y quedó afuera de la segunda mitad del tour 2024. Las nuevas modalidades de la WSL hicieron también lo suyo. Lo cierto es que el surfista más influyente de todos los tiempos, puso a fin a su etapa de competidor.
A 30 años de ganar su segundo título mundial y de esa cosecha seguida de 5 campeonatos, el más grande de todos los tiempos está listo para comenzar una nueva vida. Ya sin el vértigo de una nueva temporada que le permita alcanzar la docena de coronas; pero con el desafío por delante de una paternidad disfrutable, tiempo de calidad con los suyos y una nueva etapa, abocado a los negocios.
¿Por qué fue tan grande Kelly?
Porque logró estirar como nadie (en ningún otro deporte) la línea de tiempo útil como deportista de elite.
Porque pudo ejecutar en competencia, bajo presión, todo eso que lograba hacer en los videos.
Porque gracias a la última gran rivalidad que vimos en el mundo del surfing – la suya con Andy Irons- fue capaz de volver a competir en el más alto nivel después de un largo descanso.
Porque nunca especuló ni adujo presiones a la hora de enfrentar mares de grueso calibre.
Porque fue capaz de sumar 20 puntos en un heat.
Porque supo jugar como nadie a los juegos de la mente. Dentro y fuera del agua.
Porque abrió mentes e inspiró generaciones.
Porque dentro de muchos años vamos a poder contarle a nuestros nietos que fuimos la generación que vio a Kelly Slater en vivo y en directo.
Tahiti asoma en el calendario, fecha auspiciada por Outerknown, marca propiedad de Kelly junto a su socio John Moore, es muy poco probable que no le otorguen el wildcard. Seguramente ahí será el acto final, el de la despedida.
¿Qué pasará? Mejor esperar, algunas películas tienen final inesperado, y la de Kelly todavía se está rodando.
Gracias Maestro por todos estos años.