TXT: Carlos Enrique Brenes
Fotos: Fabián Sánchez
Clasificado como líder en todas las series que lo llevaron hasta la gran final Open, el caribeño Gilbert Brown le recordó al país que a sus 27 años de edad sigue siendo un surfista de podios al ganar ayer el Luz de Vida Surf Challenge, en las olas de Santa Teresa de Cóbano, Puntarenas.
En la primera final de la Triple Corona de Invierno 2010 que abrió aquí, el limonense sacó su garra y experiencia en un heat que dominó mentalmente al meter un ola de 8.40 al inicio de la serie, esperar que sus rivales virtualmente se fueran arriba de él, y matar al cierre con una ola de 8.30 que lo mandó al primer lugar con la combinación más alta del evento: 16.70 y 2.500 dólares a su cuenta personal.
A esta final llegó un invitado especial, el neozelandés y residente de Costa Rica, Alaric Smith que quedó tercero con 12.67, Jason Torres segundo con 12.94 y el mejor local de la fecha, Anthony Fillingim con 11.70 cuarto, que corrió la final Open y Junior tras un desgaste físico admirable.
Sonó el cornetazo de una final que sacó a la playa a unas 1.000 personas que llegaron al día 2 del evento para -en su mayoría- aplaudir y apoyar como localidad a los competidores de la zona, Smith y Fillingim; sin embargo, esta vez pudieron más los años de carrera profesional de Brown que viene levantando su nivel tras 2 años de no ganar un evento.
El nacido en Puerto Viejo de Limón, jugó su final como una réplica de lo que había hecho en la última serie de la final del Circuito hace menos de un mes. Sin desespero y paciente por las mejores izquierdas, Gilbert corrió un total de tres olas, de las cuales dos, entraron en la lista de las cinco más altas de todo el evento, solo que esta vez con mucho éxito en su selecta manera de ganar.
Jason Torres pareció ser la principal amenaza de la final, gracias a que las condiciones ventosas que entraron se acomodaban al surfista acostumbrado a ganar en olas de mala forma; no obstante, el tamaño de 2 metros se mantuvo y el surfing ayer tenía que ser de fuerza y lectura, perfecto para Brown que se concentró en correr solo las mejores.
Smith y Fillingim pusieron lo suyo (mejor Smith), pero la experiencia como tiene que ser, favoreció a los que más finales han corrido en su carrera (Torres y Brown), aunque el gran apoyo local aplaudió con admiración a los que dejaron el bronce y el cobre en casa.
De igual manera, hubo una linda ovación para “el Embajador del Pura Vida”, Gilbert Brown, quien fue levantado en hombros por sus amigos y colegas que lo fueron a recibir a la orilla, y hasta la tarima principal donde regaló sus palabras a la prensa.
“Estoy más que contento con esto ya que tenía casi dos años de no ganar un evento, eso fue en Panamá para un torneo internacional. Las condiciones fueron muy difíciles pero pude lograr el surf que planeé antes de entrar al agua porque sabía que ganarle esta final a estos señores, era cosa seria”, expresó Brown.
“Mi surfing está hecho como corre un Diego Naranjo, un Luis Vindas o un Germaine Myrie: de líneas, lectura y selección; es por eso que uno no se puede dejar impresionar por un buen aéreo o alguna maniobra innovadora. Con lo que juego, estoy en condición de meter combinaciones altas como fue hoy y por eso estoy muy feliz”, añadió.
Con este gane Gilbert Brown gana el premio económico más alto de la fecha con 2.500 dólares y se pone de líder en el ranking de la Triple Corona que se espera termine en octubre previo al viaje de la selección nacional Open a los World Surfing Games en Perú. Próximamente la federación anunciará las dos fechas restantes.
El oro Junior se queda en casa
El local de la zona, Anthony Fillingim, fue el mejor surfista de la cita tras superar notoriamente a sus rivales, Danny Bishko (10.60), Carlos Muñoz (5.53) y Alberto Muñoz (11.20), con una combinación de 13.47, 1.000 dólares en efectivo y su segundo gane consecutivo en casa en sub 18.
El local Fillingim volando.
Después de hacer su más grande desgaste físico en una competencia en la labor de avanzar a la final de las dos categorías masculinas, en la final Junior sí le alcanzó al local para aplastar a sus rivales tras un notorio conocimiento de la ola, más el ejercicio de un surfing no visto antes en Fillingim: la innovación.
“Después de Tamarindo (Marzo), mi surfing ha mejorado y esto lo he aprovechado en la competencia. Gracias también al apoyo de la gente de aquí y personas como los de Luz de Vida, pude hacer una gran fecha”, comentó Fillingim después de salir del agua.
Y finalmente en Open Femenino, los 700 dólares fueron para Nataly Bernold que superó en mucho a sus rivales Lisbeth Vindas (7.27), Julia Miller 7.33 y Flavia Fernández con 0.00 que no corrió olas en la final. Nataly combinó 12.00 y sumó las dos combinaciones más altas en Femenino en la final y semifinal (16.34).
Natalie en acción.
La próxima fecha de La Triple Corona está por confirmarse para el mes de agosto o setiembre. Este mes de Julio se anunciará el lugar y los premios en efectivo.