Entre querer aprender a surfear y surfear hay un largo e intenso mientras tanto. En esa primera línea, donde la imaginación, el deseo, las ganas y la realidad intentan ponerse de acuerdo, existen formadores. Esos primeros referentes son vitales en el proceso de aprendizaje, especialmente cuando los que están llegando a ese punto de partida son niñas y niños.

Martina Merino es una de esas formadoras, desde hace un largo tiempo se encarga de dar las primeras lecciones a quienes llegan a la Escuela de Surf Mar del Plata (dirigida por Maxi Prenski), en busca de esa sensación que seguramente seguirán persiguiendo por el resto de sus días. Además hace muy poco debutó dentro del panel de jueces de la Asociación de Surf Argentina, un dato no menor y que seguramente entusiasme a más chicas a ser parte de esa tarea.

Mientras febrero transita sus últimas olas, charlamos con ella sobre varios temas.

¿Cómo y cuándo empezaste a surfear? 

La primera vez que me subí a una tabla tenía 20 años (2010), me prestaron una en la escuela de un balneario de la ciudad, en unos meses cumplo 35 así que ya pasaron 15 años de este amor.

Un par de años antes ya me había empezado a llamar la atención por que mi hermano Ian surfaba y yo había comenzado a sacarle fotos a los surfistas, hasta que dije esto lo tengo que hacer. Yo venía del palo del Handball y esa primera ola cambió todo. 

Me regalaron mi primera tabla y cinco años más tarde (2015) arranque a competir en categoría Longboard. 

En el 2018 me formé como instructora ASA para empezar a enseñar y este último año me capacité como jueza ISA. 

¿Qué cosas aprendiste enseñando a surfear? 

Buena pregunta, aprendí de los tiempos, lo más difícil creo que es aprender de la frustración propia o del alumno y a trabajar los distintos miedos.

Un buen instructor debe ser flexible y empático con su alumno/a y ofrecer lo que cada uno necesite, no hay una norma, si una teoría base pero después depende de la constancia de cada alumno/a para su evolución.

Me pongo de ejemplo cuando me preguntan si a los 60 años o más pueden aprender, la persona que nos ve surfar tal vez cree que lo hacemos de pequeños pero no es mi caso y claro se imaginan mi respuesta… ¡No hay límites, solo hay que tener ganas!

Lo que más me marcó fue rindiendo el curso de instructora, niños de Mar del Plata que no conocían el mar y que no solo estaban conociendo el mar sino además parándose en una tabla de surf, fue desgarrador y emocionante a la vez.

¿Cómo definirías el semillero del surf femenino? 

Uhh picante lo defino y eso me encanta, hay mucho potencial y están teniendo excelente nivel. Ellas son las que me motivan y me dan fuerzas cuando tengo esos días bajón,diciéndome: “Marti vamos al agua”.  Para mi lo más hermoso es verlas crecer. 

Sin ir más lejos la vemos Aymara Ricaldone con 12 años campeona sub 14 y sub 16 en la última fecha nacional. 

Todas las chicas están súper motivadas, aman surfar y eso se nota fuera y dentro del agua.

Debutaste como jueza en un panel oficial de ASA… ¿Cómo fue esa experiencia y por qué no hay más mujeres que se animen a juecear? 

 Fue una experiencia increíble y estoy muy felíz !!!! Más que agradecida a Sergio Liotti de la ASA por convocarme, para mi una nueva etapa de aprendizaje, me sentí relajada hasta te diría más tranquila que compitiendo, como si lo hubiera hecho antes y el equipo siempre estuvo ahí firme acompañándome. 

Pienso que no hay más mujeres porque uno ve hombres y supone que es un lugar solo para ellos, pero es lo que pasaba con el surf antes no se veía tantas mujeres en el agua y hoy es todo lo contrario. 

Desde mi punto de vista todo competidor/a debería realizar el curso de Juzgamiento ISA, es algo esencial para potenciar el surfing, principalmente para unificar criterios y además para mejorar a nivel competitivo. 

Así como fomento fuerte el surfing femenino también lo haré con la parte de juzgamiento para que más mujeres se sumen, obviamente es mi invitación formal.

¿Cómo ves la nueva era del surf femenino que comenzó con la llegada de talentos como Caity Simmer, Molly Picklum y esa nueva armada de chicas que están tomando el centro de la escena? 

Me vuelan la cabeza. Tiene mucha garra y con una terrible carrera por delante, la están matando y personalmente las admiro muchísimo.

Está buenísimo que las mujeres surfeen en las mismas olas y condiciones que los hombres, ahí se eleva el nivel. 

Igual obvio muero en casa, banco fuerte el power surfing de nuestra argentina Vera Jarisz, la está rompiendo y lo mismo, con mucho futuro por delante con solo 19 años, ahora se encuentra fuera del país entrenando y ahí tenemos que poner la mira y apoyar mucho más, ya que nos representan y muy bien.

¿Qué otras cosas te interesan además del surf? 

Bueno como te decía soy fotógrafa de surf y lifestyle. Una loca de los animales y las plantas. La parte psicológica, emocional y espiritual me parece fundamental en igual medida que la nutrición y los ejercicios complementarios fuera del agua.

En mis clases o bien cuando estoy con mis compañeros de entrenamiento (algunos bastante pequeños) cuando surge algún miedo hacemos foco en la respiración, el trabajo está en calmar la mente y decirle que pensar. 

Es genial verlos relajados después surfando tranquilos, ahí ya hice todo mi trabajo de acompañarlos. También a veces si el alumno/a lo pide hacemos meditación o Reiki para estar más presentes. Amo viajar y surfar es mi vida, enseñar y transmitir esto que amo y que hace tan bien. 

¿Cuáles son los planes para este año? 

En lo inmediato los planes son, seguir aprendiendo puntualmente en el juzgamiento y aprender de todo lo que me sume para ser estar lo más capacitada posible.

Voy a realizar una curso a fin de marzo en Seguridad en el agua / Rescate de surf, es la cuarta edición de Water Safety / Surf Rescue que organiza Jetrescue.arg, se trata de rescate en el agua con embarcaciones, tabla de surf, moto de agua y más, esto me parece muy importante ya que a todos nos a pasado que nosotros u otra persona este en alguna situación de peligro, esto dá mucha seguridad en el mar.

Este año vuelvo a la pileta con olas, WaveGarden de Garopaba con todo. Una experiencia increíble y que permite mejorar mucho el surfing por su ola regular, el año pasado tuve la oportunidad de viajar con mi grupo de entrenamiento de Escuela de Surf Mar del Plata a cargo de Maxi Prenski y este abril volvemos. Y algún viaje más de surfing que surja siempre es bienvenido.

Dentro de algunos de mis sueños esta pertenecer al equipo de entrenamiento argentino y potenciar al semillero. Para eso sigo capacitándome para dar lo mejor de mí.

¿Qué sentís que la gente va a buscar cuando toma una clase de surf por primera vez? 

Adrenalina… Me lo han dicho quieren saber como es la experiencia y que se siente deslizarse sobre una ola, es muy loco ver a las personas de cualquier edad con una sonrisa enorme que no les entra en la cara por esa sensación que tuvieron, es hermoso y personalmente satisfactorio ya que transmito lo que amo y como me gustaría que me enseñar a mi. 

Como te mencionaba el tema de los miedos, es maravilloso ver a las personas con miedo al mar, afrontarlo y divertirse. 

Todos claramente buscamos una des/conexión distinta con el mar, lo usamos como terapia, deporte o simplemente con solo estar allí flotando en contacto con mar ya es suficiente 

¿Qué es el surf? 

Cliché, pero es un estilo de vida, sin dudas, todo lo hacemos entorno al surf, ir a dormir temprano para el otro día ir lo más temprano a surfar y aprovechar al máximo, mantenernos en un buen estado para una evolución más rápida. 

En lo personal me salvó la vida, siempre digo que el surf es un viaje de ida sin retorno, una vez que entras no querés salir. 

Es mi gran terapeuta, me ayuda a estar presente en todo momento y disfrutar la vida así simple cuando estoy sentada en mi tabla, no necesito más para estar plena.

El surf es mi vida y eso intento transmitir que divertirse y ser constante es todo, agarrar cualquier tabla y poder disfrutar, es lo todo lo que está bien.