A LA SOMBRA DEL VERANO

Entrevista a Hernán “Canty” Ramos


Como esos jugadores que saben que han tenido una gran faena, el verano se retira antes para ser aplaudido. Atrás quedan los recuerdos, las historias que se pueden contar, las que no, las famosas lecturas de verano (como si Raymond Carver no se pudiese leer entre el 21 de diciembre y el 21 de marzo) y todo eso que suele suceder cuando la gente lleva poca ropa y muchas ganas de mar y  sombra sobre la arena.

Hace una infinidad de veranos, desde Surfpress, supimos ver a través de la ventana de un Ninja las más diversas situaciones oceánicas. Debajo de ese disfraz de dudosa confección, se escondía Hernán “Canty” Ramos, fotógrafo de profesión y un agudo  observador, equidistante entre la realidad y la ciencia ficción. Por supuesto, necochense de tiempo completo.  Así lo hace saber en su CV.

Antes de que  el otoño tome el centro de la escena, charlamos con él sobre todos esos temas que guardan cercanía con el mar y la cultura que intentamos preservar.

¿Qué ha dejado el verano en Necochea, Quequén y zonas que no escapan a su ojo e instinto?

Lo más esperado del verano, para los que nacimos cerca del mar, es paradójicamente inverso. Encontramos el descanso y poder reencontrarnos con las playas casi sin gente. Creo que nos deja eso, un otoño de recompensa. 

¿Qué cosas ha perdido la cultura del surf en esta loca carrera por querer ser más masivo que las polémicas del fútbol?

Buena pregunta, en verdad trato de no ser muy crítico con el surf y su universo. La cultura del surf es un ecosistema, ahí viven amigos íntimos, otros cercanos, colegas y demás personas muy queridas para mí. Siento que podría incomodar con mi visión sobre este asunto. Solo me atrevería a decir que a veces, cuando algo se revuelve mucho se vuelve sólido, deja de fluir por su propia acción. También era necesario cortar y dar de nuevo. El surf como moda ya pasó, como pasan todas las modas. Creo que vienen épocas de chicos que empiezan a surfear y grandes que surfeaban desde antes.

¿Qué me podrías contar de las nuevas generaciones del surfing de Necochea?

Necochea siempre se mantuvo un poco al margen de la competencia. Con buenos exponentes, pero con otro ritmo evolutivo. Las nuevas generaciones entienden el surf desde otra óptica, se empezaron a divertir sin tener que entretener y creo que por ahí era la cosa. Hoy estoy viendo con atención a los hermanos Aued, son increíbles dentro y fuera del agua. Se toman en serio pasarla bien surfeando y tienen la impronta de surfistas de oficio en envase pequeño, son geniales.

¿Cuál es la mejor época para ir de surfari por Neco?

Después del verano, de marzo a mayo creo que es la mejor época.

¿Cuál fue el viaje que te cambió como fotógrafo?

En el 2007 viajé a Centroamérica, quería vivir de la fotografía de surf y pasar un lapso de mi vida con olas constantes. Fue sin dudas un momento bisagra. Aprendí aspectos básicos de una vida más impredecible desde lo económico. Me dio el ejercicio necesario para solventar el viaje, recorrer toda Nicaragua y gran parte de Costa rica como fotógrafo de surf. En aquel entonces mi amigo Mateo Rojas me abrió una puerta en la revista de Gravedad Zero y ese fue uno de los grandes disparadores. 

¿Cuál fue el último libro que no querías que se terminara?

Me está pasando algo por el estilo con Mr Vértigo de Paul Auster. Se acerca el final y creo que lo extrañaré.

¿Cuál fue el último artista que descubriste?

Howard Phillips Lovecraft, tarde pero seguro.

¿Qué fue de la ventana de aquel Ninja?

Un gran recuerdo, “La cocina de Seba Chacón” eran otras épocas donde ya nos íbamos sumergiendo en la virtualidad y de aquella ventana al día de hoy conserva un bullicio de redacción.

¿Llegado el caso que los terraplanistas tengan razón… ¿En qué esquina deberían poner una playa con buenas olas como las de La Esco?

Me cuesta pensar en La Esco en otro lugar geográfico, creo que es buena por donde está. Si tuviera que definir un lugar, sería a la vuelta de la esquina de todo aquel buen tipo.

¿En qué crees que mutarán los influencers?

Van a reencarnar en consumidores de contenido esforzándose en que les toque la sortija. En caso que si les toque, serán lo mismo, pero en otras plataformas. Atento en sus casas, no se dejen influenciar, suscríbanse a sus vidas.

 

 

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