El surf argentino perdió a uno de sus verdaderos alquimistas: Renato Tiribelli.
Shaper de vocación, perseguidor empedernido de los detalles, surfista de alma, un verdadero rebelde con causa. Sus tablas fueron, son y serán, como el mismo las definía, instrumentos de libertad.
De gran calidez humana y dueño de un agudo poder de observación, Renato Tiribelli es uno de los irrepetibles… De esos que se forjaron al calor de la pasión, la curiosidad y la inconformidad de lo establecido.
La historia de Renato es una parte importante del surf nuestro. Su incondicional amor por el oficio manual, la incansable búsqueda en tiempos pretéritos y su destreza en la manipulación de los elementos, lo convirtieron en un verdadero maestro en el arte de las formas.
Gracias por tu arte y tus dones de gente… Se lo va a extrañar maestro.