50 años de Lightning Bolt… Una era dorada
1971, un rayo cargado de electricidad e inspiración elige caer en el lugar indicado; Hawaii. Los influjos del fenómeno tenían como destinatarios a Gerry Lopez y Jack Shipley.
El primero, un surfista y shaper singular que se tomó el tiempo de moldear su técnica en distintas olas de Oahu para después terminar de pulirla en Pipeline. Su técnica resume a la perfección eso que afirma que menos es más. Todo lo que falta en el surfing de Lopez realmente no es necesario y todo lo que está es lo que todavía muchos siguen buscando. La pureza de sus líneas y la distensión corporal que demuestra, todavía hoy a sus 72 años, siguen ocupando la primera página del ABC del surfing.
El segundo, un juez internacional de surfing que se tomó el trabajo de advertir a todos los surfistas que por aquel entonces llegaban a Hawaii para testear sus límites, sobre la importancia de surfear en el North Shore con una tabla Lightning Bolt debajo de sus pies.
Así; Lightning Bolt comenzó a escribir los primeros párrafos de una historia que hoy cumple 50 años, pero que lejos está de quedarse quieta. Después de las icónicas tablas surfeadas por los más grandes surfers de la época, llegó la ropa del rayo para seguir reflejando en las calles, ese estilo de vida que encontraba su punto máximo de expresión en las olas.
La evolución de la marca estuvo signada por un inquebrantable espíritu de libertad que supo tocar todo lo que fue encontrando en su camino, para abrirse paso desde Hawaii hasta California, para luego emprender un viaje expandiendo su energía por Australia, Europa y finalmente desembarcar en Argentina.
50 años después de la primera remada de Gerry Lopez y Jack Shipley, Lightning Bolt recorre las páginas doradas de su historia, siempre inspirada en el surf, las aventuras y el espíritu de una generación que marcó un camino del que difícilmente podamos escapar.